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Consejos y presupuestos rápidos para todos sus proyectos
En un dormitorio, (a menudo contiguo al despacho), lo mejor es crear un ambiente íntimo y cálido con varias fuentes de luz. Optar por una primera fuente de luz directa, como una suspensión, acompañada de varias luces indirectas, como aplique de pared, utilizables como luces de lectura o en sustitución de las lámparas de cabecera, es una excelente elección.
En general, la habitación no debe estar excesivamente iluminada; una iluminación suave sin ser demasiado tenue crea un ambiente acogedor e íntimo. Los reguladores de intensidad permiten ajustar el nivel de luz a voluntad, modulando el ambiente. Y evita las bombillas demasiado blancas o frías: opta por 2500k o 3000k.
En las mesillas de noche, la luz puede ser suave y filtrada para no deslumbrar. Las mesillas y las lámparas deben estar a la altura de los ojos de la cama. Evite las pantallas opacas y opte por formas cilíndricas o de tambor para dispersar la luz por la habitación. los apliques de pared Monte et Baisse de Daniel Gallo serán el sustituto ideal de tus lámparas de mesilla.
Las lámparas de pie son perfectas para un dormitorio porque pueden proporcionar mucha luz en altura; de hecho, es mejor elegir una pantalla ancha para repartir la luz hacia arriba y hacia abajo en lugar de hacia los lados.
Recomendamos evitar lámparas de pie en el techo, y reservarlas para el interior de un armario o vestidor.
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